La ordenación del
territorio u ordenación territorial es una especialidad científica, y técnica
administrativa; influida por multitud de disciplinas; especialmente por la
geografía física, la geografía humana y las ciencias ambientales que tienen
como objetivo una ocupación racional del territorio, mediante la aplicación de
normativa que permita o prohíba unos determinados usos de la tierra.
La planificación territorial
estuvo ausente en Venezuela; tal situación generó alta demanda poblacional,
generando sectores vulnerables y
ocupación de áreas verdes localizados en la franja centro-norte-costera, en
contraste con el resto del país, una gran extensión semidespoblada con un
enorme potencial en recursos. Esta desequilibrada ocupación del territorio
nacional creó graves problemas sociales y ambientales en sus principales
ciudades restando dinamismo.
Cabrera, Yoly (2011)
indica lo siguiente: “La Planificación y Ordenamiento del Territorio es de
naturaleza sociopolítica, por cuanto al ser concebida como política del Estado,
concierne a toda la sociedad, e involucra a diversos agentes y organizaciones
sociales que actúan en la realidad considerada. La acción política de someter a
dirección, promoción y control una realidad socio-territorial y ambiental
asentada en un territorio, constituye un mecanismo de legitimación del Estado
para ampliar sus bases sociopolíticas”. Ante lo expuesto anteriormente ¿Desde
dónde se puede realizar una planificación para que la ordenación del territorio
sea factible?
Se puede decir que el
desarrollo en la actualidad hay que reconsiderarlo y convertirlo en un elemento
que combine eficazmente con la naturaleza y las comunidades, así como también
que garantice los bienes naturales.
Ello implica un modelo
de desarrollo humanista, que coloque al ciudadano y ciudadana en el centro de
su atención, conciliando su relación con el ambiente, impulsando un nuevo
modelo de producción y consumo, garantizados mediante un compromiso establecido
a través de la participación popular; por tanto, se impone una nueva
planificación, ajustada a cada medio, de acuerdo a las aptitudes territoriales
presentes expresadas en la zonificación territorial, que permita asumir la
pluralidad de actores, los cambios y también admitir tendencias establecidas
que deban ser replanteadas por otras nuevas, incorporado un componente de
flexibilidad y una visión endógena, lo cual puede ajustarse también al esquema
del llamado Ecodesarrollo.
En general, la
planificación participativa vinculada al ordenamiento territorial busca,
desechar modelos y visiones que ya no resuelven los problemas de la gente, sino
ubicarse en las tendencias que apuntan al desarrollo, armonizar los esfuerzos
públicos y privados, darle viabilidad abriendo cauces a los emprendimientos en
concordancia con el ambiente; realizándolo de forma interactuada con las
comunidades en todas sus fases e implica reducir la brecha entre el marco legal
preexistente y los nuevos instrumentos jurídicos, para conseguir la consonancia
requerida entre lo que dice la ley en Venezuela, y lo que se aspira en el marco
del Ecosocialismo.
Todo esto debe
iniciarse desde la construcción de los nuevos urbanismos, adaptar la
construcción al ecosistema y no en viceversa, pero para ello se debe realizar
interacción del profesional de ingeniería y arquitectura directamente con las
comunidades para la adaptación de los proyectos de acuerdo a los estudios
etnográficos de la localidad.
Para concluir es
importante que la planificación y ordenación del territorio se establezcan
leyes ajustándolas con la realidad y proyectándolas a futuro para evitar la
degradación de las pocas áreas verdes que existe en las zonas urbanas y
rurales. También aplicar sanciones para aquellas constructoras o constructores
que desarrollen construcción y no cumplan con las normativas ambientales.
Es indispensable que
los diseños urbanísticos y de grandes infraestructuras se adapten al medio; es
decir la Península de Paraguaná presenta abundante vientos por lo que requiere
el diseño de viviendas ecológicas con la implementación de energía eólica o
solar, todos estos elementos en conjunto son factores factibles para que una
ordenación territorial sea ecológica y endógena para el avance del desarrollo
del país.
Este nuevo enfoque
erradicará las viejas políticas del capitalismo salvaje que hoy en día afecta
al medio ambiente, pero para que esta nueva adaptación sea viable es necesario
enfocar temas ambientales a estudiantes de ingeniería y arquitectura con la
interacción directa a la comunidad y que dicho estudio sea interdisciplinario.
Autor: Siembrambiental